Rory McIlroy lo ha hecho todo en el mundo del golf profesional, ganando más de 40 títulos, incluyendo cinco Ryder Cup, tres FedEx Cup, seis Race to Dubai en el DP World Tour, cuatro ‘majors’, ha ocupado el número uno del mundo y mucho más, con apenas 35 años. Aunque falta bastante para el final de su carrera, el norirlandés ha dejado claro en una entrevista con Iain Carter de BBC Sports que tiene tres objetivos pendientes en el camino.

El primero, no hay sorpresa, es vestir la chaqueta verde de Augusta National, ganar el Masters, el único ‘major’ que lo ha eludido en su carrera (y de paso cortar década sin levantar un trofeo de los ‘grandes’).

"Me he dado cuenta de que lo único que puedo controlar es a mí mismo", afirmó. "Lo que me conviene ahora es centrarme plenamente en mí mismo y sacar lo mejor de mí mismo para volver a ganar los torneos más importantes del mundo”, dijo el norirlandés al medio británico: "He estado muy cerca de conseguirlo durante los últimos años, sin poder hacerlo y ese es el objetivo principal de este año".

Aunque no la incluye en su lista de deseos, también tendrá la oportunidad de cortar la racha en su casa, cuando The Open se celebre en Royal Portrush, el campo más importante de Irlanda del Norte.

Si el primer objetivo está a tres meses de distancia, el segundo está a tres años: “Ganar una medalla Olímpica”. Aún es muy temprano para saber si Rory estará siquiera en el ‘field’ de Los Angeles 2028, pero es claro que, a diferencia del Masters, solo tendrá una oportunidad en los próximos siete años.

Y curiosamente, el tercer objetivo de McIlroy lo lleva nuevamente a los Estados Unidos, y es —volver a— saborear una victoria de Ryder Cup en condición de visitante. Ya lo hizo en Medinah 2012 y tendrá la oportunidad de repetir en septiembre, en Bethpage Black. 

Aunque la probabilidad es más alta que en los eventos anteriores (50/50), la oportunidad es tan escasa como el oro olímpico, una en cuatro años.

"Me han oído decir esto muchas veces, pero uno de los mayores logros en el juego en este momento es ganar una Ryder Cup fuera de casa y tenemos la oportunidad de hacerlo este año", dijo.

"Creo que una cosa es mantener el dominio en casa, algo que hemos podido hacer de manera bastante consistente. Pero es una tarea enorme [fuera de casa]”, admite el jugador.

"Es un equipo estadounidense muy fuerte, una multitud muy partidaria. Pero tenemos un capitán maravilloso y vamos a tener un equipo maravilloso y estamos disfrutando del desafío".