En noviembre continúa la temporada de lluvias en Colombia, clima que tiene un impacto en múltiples factores del juego como el estado de los ‘fairways’, el rodaje de la bola, la seguridad de los jugadores y, por supuesto, la estrategia de juego, por lo que no hay que dejar nada al azar
De la mano de la Green Section, y con inversión propia, la mayoría de los clubes del país han alcanzado altos estándares de cuidado de sus campos, con enfoque en tres puntos esenciales Drenaje: Asegurarse de que el sistema de drenaje esté funcionando correctamente para evitar la acumulación de agua. Mantenimiento: Reducir la frecuencia de corte y mantenimiento para evitar dañar el césped saturado y aumentar la capacidad de absorción de agua. Control de erosión: Implementar medidas para prevenir la erosión del suelo y los búnkeres.
Seguridad: Evitar jugar durante tormentas intensas o cuando haya riesgo de rayos. Conocer las señales de advertencia y seguir las instrucciones del personal del campo. Traje adecuado: Llevar ropa y calzado impermeables para mantenerse seco y cómodo. También es clave asegurar el ‘grip’, que puede cambiar con la humedad. Visibilidad y estabilidad: Asegurarse de tener una visibilidad clara antes de golpear, así como tener especial cuidado con superficies resbaladizas, especialmente en áreas de césped y caminos. Finalmente se aconseja verificar el estado del campo antes de jugar, ajustar el juego según las condiciones climáticas y respetar las áreas cerradas para mantenimiento. Al tomar estas precauciones, los campos de golf pueden mantenerse en óptimas condiciones y los jugadores pueden disfrutar de un juego seguro y divertido durante la época de lluvias. |