Caer en una trampa de arena es uno de los desafíos más comunes en el golf y salir de ellas puede ser un desafío, incluso para los golfistas más experimentados. Aunque no hay dos búnkeres iguales, y cada caso es único, hay varios consejos que pueden servir, a todo nivel, para que el reto no se convierta en un tormento y salir bien librado rumbo al ‘green’. 1. Escoge el palo adecuado: Utiliza un wedge con mucho loft, como un sand wedge o un lob wedge, para poder elevar la pelota fácilmente fuera del búnker. Si la bola no está enterrada y el búnker no está cerca al ‘green’, puedes escoger otro tipo de hierros que brinden más distancia 2. Posición del cuerpo: Coloca tu peso ligeramente hacia adelante y abre ligeramente la cara del palo para facilitar el golpe. 3. Mantén un buen agarre: Agarra el palo firmemente pero sin tensión excesiva para tener control en el golpe. 4. Practica el ‘swing’: Realiza un ensayo suave y controlado, manteniendo la cabeza quieta y siguiendo a través del golpe. 5. Golpea la arena, no la pelota: Concéntrate en golpear la arena unos centímetros detrás de la pelota para que esta salga fácilmente. 6. Sigue la línea de la pendiente: Observa la inclinación del búnker y ajusta tu postura y swing en consecuencia. 7. Visualiza el golpe: Antes de golpear, visualiza el golpe perfecto y confía en tu habilidad para ejecutarlo. 8. Practica diferentes distancias: Entrena en búnkers de diferentes distancias para familiarizarte con la fuerza necesaria en cada situación. 9. Controla la velocidad: Ajusta la velocidad de tu ‘swing’ según la distancia que necesitas recorrer fuera del búnker. 10. Mantén la calma: No te frustres si no logras salir a la primera, sigue practicando y mejorando tu técnica. |