Aunque debería ser una prioridad para los golfistas conocer sobre Reglas de Golf, muchas veces el desconocimiento o una situación en particular los termina nublando con la presencia de un juez, a quien no aprovecharon correctamente.

Son demasiadas las situaciones en las que los jugadores se ven envueltos en estrés ya sea por un mal 'lie' de la bola, obstáculos, entre otros. Lo normal es llamar a un juez para, pero se debe tener claro que ellos no pueden beneficiar a un jugador en particular y por eso hay que hacer un 'approach' diferente en la conversación.

Recuerda Marc Puig en una de sus entradas en SotaPar que cuando era un niño experimentó una jugada de aquellas de la que aprendió mucho sobre cómo hablar con los jueces.

En una salida su bola terminó mal puesta y con "una estructura que impedía realizar" el 'swing' por lo que solicitó la asistencia de un oficial de Reglas.

"¿Puedo dropear sin penalidad? Yo creo que esto es algo que ha puesto aquí alguien", le dijo Puig al juez quien le respondió: "Según lo que me cuentas, no puedes aliviarte".

Dicho eso, Marc decidió pegarle a la bola en esas condiciones y el resultado fue fatal, un cuádruple 'bogey' que lo sacó de la ronda.

Cuando llegaban a la zona de entrega de tarjetas se encontraron de nuevo y el oficial le comentó: "Tal como estabas en el hoyo 10 podías haber tomado muchas alternativas a tu decisión", lo que enfadó aún más al joven golfista quien le reclamó: "¿Y por qué no me lo has dicho? ¿Cabes cómo ha condicionado mi vuelta ese hoyo?".

Es allí donde llega la enseñanza ya que, en parafraseo del juez, él respondió estrictamente a la pregunta que le hizo Puig y sin haber más cuestionamientos le dejó jugar.

"Cuando necesites un árbitro no debes preguntarle si tu aplicación del reglamento es correcta. Debes preguntarle ¿Qué opciones tengo en esta situación? Y gustosamente te listará todas tus posibilidades para que seas tú quien decida", comentó Marc.

Así las cosas, un oficial de Reglas puede resultar de gran ayuda si sabemos cómo acceder a su conocimiento y entendemos que no se trata de una autoridad sancionadora sino asistencial y consejera.